Supongo entonces que esos tiempos declinaron,
que la belleza se escondió bajo mis zapatos.
Tal vez el macadán dejó piedras enterradas en sus
Parpados.
Fue quizás que los días eran una reduplicación,
y las albuferas ya no eran del color de la piel.
Allí, cobrizas bajo un sol halado por
la línea del horizonte.
Las siluetas en el espejo de agua,
las remembranzas, el olor de la canela,
las marquesinas para no escaldarnos.
Cada día ocultándonos del sol,
Esperando que las sombras esclarezcan.
6 comentarios:
Supongo que los tiempos están cambiando ... :)
Saludos.
Otra vez tus versos me roban la palabra, leo y releo pero no sé qué decir ante su belleza, frente a esta nostalgia que me reclama para sí.
Gracias gracias, Nahuel.
Un abrazo
Ío
Tus versos me llevan a otro mundo, lejos de aqui, te felicito por la forma de decir hasta lo que no dices..
Saludos
Leerte es como una dulzura nostálgica(con olor a canela) que se roba todas mis palabras...
No lo dije pero esa foto me da paz..
quiero leerte más!
Bellísimo, Nahuel.
Todas tus palabras forman un mundo de sensaciones del que es difícil prescindir.
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