I
Somos seres de luz;
dos ángeles de tez dorada
atrapados en el pantano.
Somos mascaras entrelazadas;
disfraces que amanecen,
sandalias desgastadas.
Te he dicho olvídalo,
pero tú eres tenaz como el viento.
Te he dicho camina,
pero tú corres y saltas.
dos ángeles de tez dorada
atrapados en el pantano.
Somos mascaras entrelazadas;
disfraces que amanecen,
sandalias desgastadas.
Te he dicho olvídalo,
pero tú eres tenaz como el viento.
Te he dicho camina,
pero tú corres y saltas.
Etiquetas: nahuel, poesia, senda del nahuel
4 comentarios:
Una deliciosa paradoja desobediente...
me gusta tu metáfora... poco a poco vienen llegando tus letras.
Los seres de luz se buscan y se encuentran, juntos se liberan de la oscuridad del pasado, y vuelan, corren, saltan, pero siempre de la mano.
Besos de mariposa, Nahuel.
Porque la luz no entiende de acatos, es libre para haceros y deshaceros, para volver una y otra vez al mismo punto.
Tiene este poema algo muy especial, y muy bello, la mayoría de tus versos son así.
Gracias, Nahuel.
Saludos y buen día
Ío
me gusta tu metáfora... excelente reflexion!! te felicito....se nota que cada una de las palabras te salen del alma... a mi tb me encanta la escritura y la poesia y en mis ratos libres me gusta recorrer blogs en busca de talento y el tuyo me ha maravillado
saludos
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