jueves, 31 de enero de 2013

Uno para descartar...


Allí estaba el viaje, pendiente.
Noctambulo, entre cartones
y estuches de cuero.

Aquí está el presente,
que huele a la tez arrugada
y azulina de unos labios.

Sobre la hoja de madera
Que recibió tantas lágrimas,
ahí el pasado; con su olor
a costas de Lima, y a la cortina
de boira espesa y de
flan melancolía.

Aquí está el presente,
Y camina de puntas
el fracaso, valetudinario,
con su túnica y bastón.

Allá estaba el viaje, desdeñado, en el primer verso.
Pues vacíos de bríos escogimos ejidos de balcón.

Etiquetas: ,

4 comentarios:

Blogger Ío ha dicho...

Y se quedaron los pies clavados en el mismo sitio.
Cuanta melancolía, Nahuel, y que bella.
Gracias.

Y gracias, que lo estés tú también.
Abrazos.

Ío

1 de febrero de 2013, 2:47  
Blogger Ibeth Hache ha dicho...

Al fin te leo y este poema en especial lo disfruté. Descarta el abandono.

Saludos.

2 de febrero de 2013, 0:46  
Blogger Leticia ha dicho...

Vivimos entre los opuestos Nahuel, y tú como creador de imágenes lo simbolizas en tu poema con objetos-sentimientos. Y sí, uno se queda sin irse la mayoría de veces. Un placer volver a leerte. Un beso amigo

3 de febrero de 2013, 0:22  
Blogger Laura Sánchez ha dicho...

Este poema me ha despertado nostalgia de viajar, que parece que casi se ha convertido en enfermedad.

Un beso muy fuerte.

10 de febrero de 2013, 14:39  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio