Descansar sobre la dehesa,
Corrías entre los arrayanes con tus mejillas lívidas
Dibujando futuros que nunca llegaron.
Manoteando vientos que se te escapaban incautos.
Inhalabas el aire límpido de las mañanas
Esparcidas como mantequilla de vainilla.
Y ente tus uñas años preciosos que se escurrieron en un tic-tac.
Tu cabello suspendido como un cendal,
Agitado por el céfiro de nuestras noches.
Los rayos en aquel campo entre guaduales,
fulminaron las millas que eran antes distancia.
7 comentarios:
Una forma especial de la poesía, su expresión y su potencia versal. Vengo a acompañar tu poesía y -si no incomodo- me quedo a leerte.
Un abrazo.
Qué delicia, Nahuel, me ha gustado muchísimo.
Un abrazo y... me quedo por tus lares.
Descansar sobre un recuerdo, es como soñar despiertos.
Muy lindo poema, felicitaciones.
Un cálido abrazo alado,
Diana
Veo unos textos muy buenos acá, te agrego así puedo volver con mas tiempo! Fértiles saludos!
Muy interesante forma de decir, Nahuel.
Me encantó lo de la mantequilla de vainilla.
Un abrazo
Ana
Pasaba a hojear tu blog,y me ha gustado lo que he leído.
Saludos.
En verdad te expresas muy bien, me ha gustado mucho.
Un abrazo.
HD
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