baja vertical a los parpados que descubren.
Al fondo y tras la retina un
cementerio vacío.
Recuerdo y es una imagen a lápiz
de un campo de gladiolos
sempiterno.
Y todos los sueños que soñé
son un tinto a las tres de la
tarde;
Un camino virgen que se borra.
Está bien concluir así,
Como papel fotográfico en blanco.
Como si acaso estuviera naciendo.
Como trazando un ultimo intento.
6 comentarios:
No sé porqué, me encanta la sonoridad de la palabra orvallo...
Delicado y precioso poema...
Quizás todos los intentos sean el último, y así la lluvia recuerde.
Es precioso, Nahuel, mencantó¡
Gracias por tu poesía, gracias.
Saludos.
Ío
Tan suave como la garúa en madrugada. No te retires.
Tan suave como la garúa en madrugada. No te retires.
Nahuel ¡Salud!
la poesía... acerca, identifica, evoca, derrumba, construye,apasiona, ahoga, crea amigos o enmigos y mucho más pero... esencialmente conmueve
No hay consejos, ni pruebas que la poesía no dicte. Por lo pronto estoy conmovida. Bello. Un abrazo y un te quiero, amigo y poeta.
Precioso poema, Nahuel. Tus poemas siempre llega con suavidad de estrella y al mismo tiempo con cierto instinto animal.
Enhorabuena
Un abrazo
Ana
Publicar un comentario